viernes, 29 de marzo de 2013

Pinceladas sobre vidas de autores: León Tolstoi

León Tolstoi (1828-1910) pertenecía a una familia acaudalada sin embargo se queda huérfano siendo muy pequeño. Fue un mal estudiante y no terminó la carrera de Derecho, después de perder el tiempo y ligar con todas las jóvenes de la nobleza rusa, decide alistarse en el ejército, olvidar sus deudas del juego.

Empezó a escribir por aburrimiento durante una cura reumática y tras haber disfrutado de bailes en sociedad y haber visto ; de esas horas muertas nacerían sus Memorias divididas en Infancia, Adolescencia y Juventud, después La tala del bosque y Relatos de Sebastópol que le dieron fama. Más tarde crearía Los Cosacos, Anna Karenina y Guerra y Paz.

Fue un escritor realista, vegetariano, anarcopacifista, defendió la lengua Esperanto, también fue un filósofo cristiano libertario en influyó en Gandhi con quien intercambió varias cartas; con quien también lo hizo fue con George Bernard Shaw, Rainer María Rilke y el Zar Nicolás II de Rusia. Además tras un viaje por Europa decide abrir una Escuela para pobres y siervos. Paradójico es que tras la aventura tórrida con una campesina nace su primogénito, Timoteo, al que no enseñaría a leer ni escribir.

Se va a vivir al campo, a la finca Yásnaya Poliana con Sofia Bers quien le dio trece hijos, fue una esposa abnegada, melómana y fiel secretaria (llega a copiar hasta siete veces un manuscrito hasta que su marido termina de corregir).



Su vasta obra literaria compilada en el Museo Tolstoi de Moscú y de la que reniega en los últimos años de su vida cuando decide irse a pasar los días con los campesinos, queriendo ser uno más de ellos, arando la tierra y trabajando como zapatero o profesor.

Muere camino de un retiro humilde en la casita del jefe de la estación de tren de Astápovo cual personaje de una de sus obras cumbre.

Aquí dejo algunas de sus frases:

"El que ha conocido solo a su mujer y la ha amado, sabe más de mujeres que el que ha conocido mil."

"La razón no me ha enseñado nada. Todo lo que yo sé me ha sido dado por el corazón."

"La muerte no es más que un cambio de misión."

"Toda reforma impuesta por la violencia no corregirá nada el mal: el buen juicio no necesita de la violencia."

Y para terminar, este fragmento de El cuento del emperador:

"Recuerda que sólo hay un momento importante y es ahora. El momento actual es el único sobre el que tenemos dominio. La persona más importante es siempre con la persona que estás, la que está delante de ti, porque quién sabe si tendrás trato con otra persona en el futuro. El propósito más importante es hacer que esa persona, la que está junto a ti, sea feliz, porque es el único propósito de la vida."

miércoles, 27 de marzo de 2013

Frases robadas

Shakeaspeare dixit:
"La vida [...] es un cuento contado por un idiota, lleno de estrépito y de furia y que no significa nada."

Tolstoi dixit: 
"Todas las familias felices se parecen; las desdichadas lo son cada una a su modo."

Emilia Pardo Bazán dixit:
"Solo entonces he gustado los frescos y naturales sabores del vivir [...] porque aplicaba mi actividad a cosas distintas de estar día y noche pendiente de lo que puede ocurrir en otra alma humana, selva oscura donde penetramos con paso incierto..."


Marcel Proust dixit:
"[...] Lo que quiero a la vez es un reposo y una escuela. [...] Pensaba que se podía ser vil y a la vez seductor."

"No me respetas, luego no puedes amarme."

"[...] Pero no había contado con una fuerza que, si se ha nutrido de la vanidad, vence al cansancio, al desdén, hasta el fastidio: es la costumbre."

Motivación creativa


lunes, 25 de marzo de 2013

Poema perteneciente a Cuaderno de hada maldita


Todo  y  nada
Con las manos vacías, sin nada, con el alma arrugada.
Sin nada y teniéndolo todo, con las manos atadas.
Con el alma apagada, sin nada en las manos.
Sentada sobre los días, perdiendo el hoy, sin poder olvidar el ayer.
Todo puede llegar mañana, soltando las manos del ayer y dejándolas sin nada.

Frases inspiradoras


"No vemos jamás las cosas tal cual son, las vemos tal cual somos".
"La vida se dilata o expande en proporción al propio coraje".
"Es la culpa, el miedo, la impotencia lo que hace crueles a los hombres".
(Anais Nin)

domingo, 17 de marzo de 2013

Reflexiones sobre la infancia

Cuando los héroes son los padres y el olor de un ser querido te da una seguridad brutal: eso es la infancia.
Ante la avalancha de recuerdos del pasado, uno se emociona, añora; otras veces duele mirar atrás, también uno se enfada consigo mismo por no recordarlo con más detalle.

A veces es muy sencillo zambullirse en la queja de no haber sido querido o protegido más en determinados momentos pero después de calmar al niño herido que se esconde entre las paredes de venas, corazón y  mente, se acepta que simplemente "somos mayores". Y es que el tiempo pasa por uno y la memoria puede llegar a ser cruel.

Ir a rebuscar en el árbol de la infancia significa que uno no es el mismo de ayer. Las etapas de la vida vienen y se van, nos traspasan las imágenes de la  niñez emborronadas con lo mejor y tratamos de olvidar lo peor para avanzar y seguir caminando.


Si se busca el tiempo vivido creyendo haberlo tenido todo y hoy se siente un vacío, algo falla, la sensación de pérdida es como una raja mal cerrada entre dos dedos; por lo tanto habrá que purgar el dolor y dejarlo en la zona de deshechos de emociones desusadas, quedarse con lo luminoso y seguir buscando eso mismo en el ahora.

Aunque está mal visto reivindicar la ternura, el amor, la fe y el sacrificio por el otro, ser lo mejor de uno mismo, en el fondo esto es lo que busca el ser humano; más allá de tener un cuerpo diez, la casa ideal, ser el mejor en lo profesional, saborear las tentaciones de la carne, la farra, gastar billetes de cien o vivir en el filo de la navaja. Cuando uno busca lo eterno en lo pasajero suele desmoronarse y se regresa a lo que se vivió de pequeño.

Ensoñaciones de los albores de mi vida se arrancan de mi sistema límbico en mitad del día, mientras hago la compra o cruzo la calle y cada vez me sucede más a menudo. Ya no tengo veinte ni treinta años, el tiempo no se detiene...

Me acuerdo de aquellas escenas cuando:

Cuando mis pies eran tan pequeños que se colocaban a la perfección sobre los de mi padre, me sostenía con cariño y bailaba conmigo en el salón de casa.

Cuando me hacían fotos, me contaban cuentos y cocinaban para mí.

Cuando al acostarme me daban un beso y me bendecían.

Cuando muchas noches después de salir de mi habitación mi madre, se quedaba en el aire ondulante la fragancia de su perfume.

Cuando nacieron mis hermanos pequeños y sentí que mi deber era protegerlos, como una loba a sus cachorros; cuando supe que nos entendíamos solo con mirarnos.

Compartiendo mi familia -especial y con más miembros, al estar separados mis padres- su tiempo conmigo, el que pudieron darme, estando conmigo,a mi lado o en silencio; ese alimento invisible me ayudó a crecer y a valorar la capacidad de dar de las personas.

Estas evocaciones y otras que me han contado, no se pierden, están en el álbum de mi corazón y para mí hoy, siendo una mujer aguerrida, un abrazo sigue siendo el poder más fuerte del mundo.

viernes, 15 de marzo de 2013

Me gusta/No me gusta


Me gusta que me despierten con un abrazo impetuoso cuando estoy adormilada y lo onírico se funde con la realidad brumosa; cuando mi respiración es una canción de cuna. Me gusta abrir las manos y cerrarlas con fuerza para sentir la sangre correr como un volcán. 

Me gusta sentir que mi amado piensa en mí inesperadamente, me besa en la nuca o me acaricia como si fuera un membrillo en extinción. Me gusta


No me gusta los ruidos que no sé de donde vienen y retumban en mi cabeza. No me gusta caminar por el día incierto y volver a empezar, no me gusta la verdad abrupta. No me gusta despedirme, dejar atrás momentos sostenidos en el aire.  No me gusta.

Me gusta que las horas se deslicen, sentir el viento rozando mi cabello, una mano firme y suave que me lleve de paseo, no distinguirme con los sauces que esperan al río antes de ser riachuelo. Me gusta sentir que soy del bosque como una mariposa atolondrada recién nacida, perseguir el olor a leño de una hoguera abandonada, salir del reino de los edificios vacíos por fuera y llenos por dentro.

No me gusta mirar el reloj, obedecer a los hombres altos y con corbata. No me gusta aburrirme, dejar mi cuerpo olvidado en un rincón. No me gusta bajar al trastero mental donde viven entumecidos culpa y rencor, ni subir al desván neuronal a encontrarme con las ilusiones cándidas. No me gusta.

Me gusta ser invisible, no me gusta ser objeto de disección; me gusta guardar secretos, no me gusta que los demás decidan por mí; me gusta la sublime belleza de lo sencillo, no me gusta delinear mi destino. 

Me gusta amar y no me gusta que me castiguen. No me gusta no entender a los demás pero menos a mí misma. Me gusta la soledad y el vértigo vital a sorbitos. No me gusta que la luz del amanecer me salpique en los ojos y me despierte. 

No me gusta someterme a las tentaciones hipnotizadoras que enroscan hasta soltarte en un profundo abismo. Me gusta azotar la piel de la vida. Me gusta.

jueves, 14 de marzo de 2013

Mis aforismos vespertinos

En la vida uno debiera estar preparado no solo para lo inesperado sino para lo inimaginable e incluso para que ocurra lo mejor.

Caminar y recapacitar son acciones necesarias, mientras que respirar y sentir son vitales.

Es sano entrar en el cuarto de la soledad desusada, estar en silencio y no pensar en nada.

Somos lo que hacemos, pensamos y decimos pero también lo que no hicimos ni imaginamos y lo que callamos.                                                                                                                                            

Podemos ocultarnos a los demás pero no a nosotros mismos.

Todos vivimos atenazados por sombras y se nos olvida que éstas son inasibles y burlonas; reflejos de lo oscuro de cada uno, así que será mejor no tomarlas muy en serio y jugar con ellas, en vez de esperar a que nos devoren.

lunes, 11 de marzo de 2013

Poemario vanguamoroso

Poema a mi hermana

Hadas de purpurina plateada danzando sobre sus cabellos de hilo y gasa.

Unas pestañas de seda, aquellos lazos rosas y eternos
 para envolver sus piececitos de alas blancas.

De brillante muselina su vestido de piruleta,
con unos tirantes que alcanzan la luna,
tan grande e inalcanzable. 

Intensos rayos de lorenzo para despertar de un sueño de una noche de verano en que fui hada madrina y ella, siempre la misma.


jueves, 7 de marzo de 2013

Frases inspiradoras


" Por buscarme, Poesía, en ti me busqué:
deshecha estrella de agua,
se anegó en mi ser.
Por buscarte, Poesía,
en mí naufragué. [...]"
(Extracto del poema El Sedienteo de Octavio Paz)

Poemas de fin de semana

A-le-te-o
El aleteo de nuestras pestañas, mariposas danzando con la primavera.
Junto al riachuelo se doblan nuestros cuerpos,
a lo lejos nos contemplan las murallas castellanas.
Se funde el paisaje, la piel y el a-le-te-o porque:
te-qui-e-ro

Invisibles
Vagamos por senderos de plata,
a rastras sobre la alfombra de camelias despedazadas.
Sombras enlazadas bajo un cielo desestrellado.

Rojo
Tiño de rojo oscuro mi túnica,
busco las dunas eternas,
sin sol ni luna,
muda y desnuda te sueño.